4.8.07

Los peligros de la Santa Muerte y los huicholes

Hace poco se realizó un congreso de exorcistas en la Ciudad de México. Parece que llegaron sacerdotes de todas partes del mundo y algunos de ellos eran eméritos en la materia. Después de días de discusión, ponencias, conferencias y convenios, el diagnóstico fue que cada uno de diez mil mexicanos se encuentra “endemoniado” a causa de las prácticas religiosas populares que se usan para la resolución rápida y efectiva de los problemas. Dentro de estas prácticas se menciona con frecuencia el ámbito de las limpias y la adoración a la Santa Muerte.

Es pertinente mencionar que el concepto “endemoniado” no remite propiamente al ámbito de la posesión, puesto que sólo implica la presencia de un espectro dentro de un cuerpo que no le pertenece, no refiere a la toma absoluta del cuerpo por parte del chamuco. Sin embargo, parece que dentro de esos miles de endemoniados, hay presencia de poseídos contra los que los exorcistas habían perdido la batalla.

El congreso se realiza en una de las comunidades católicas más fieles del mundo (que no podría decir ortodoxa por el rotundo guadalupanismo que experimentan los feligreses mexicanos, mayor que cualquier otra vertiente y fruto del andamiaje mediático del anterior Papa), pero con un mestizaje cultural exacerbado. En la República existen más de 100 lenguas indígenas (consúltense Lingmex: http://lingmex.colmex.mx/), las cuáles representan más de 100 distintas formas de concebir, nombrar y experimentar el mundo. Cada una de las posibles visiones tiene posibles soluciones a la problemática cotidiana, entre ellas, las prácticas religiosas que implican distintas formas de establecer equilibrio y reciprocidad con las fuerzas que no se entienden y que emergen de ámbitos desconocidos.

Ante la imponente presencia multicultural en México ¿cómo es posible delimitar aquello que se llama “el mal” y la presencia demoníaca? Para los pueblos huicholes (dependiendo de cada una de las vertientes del huichol) sería complicado mostrar panfletariamente cuál es la presencia del “maligno”, según las pautas cristianas, siendo que no hay muchos puntos de entronque para hacerlo. Cuál podría ser el punto ecléctico entre lo que cree un habitante huichol, frente a lo que cree un habitante profundamente católico de Guadalajara. Y así con todas las demás comunidades indígenas: los que hablan Pame, los que hablan amuzgo, cahita, cochimí, chontal (tanto de Tabasco como el de Oaxaca, profundamente distintos cada uno), kanjobal, kiliwa (creo que con un solo hablante ya, puesto que hace un año anunciaron en La Jornada la muerte de la hablante más anciana de kiliwa que quedaba y no sé de cierto si era la última). Resulta tremendamente complicado para cualquiera que tiene conciencia de la alteridad siquiera plantear la posibilidad del reto impuesto.
Actualmente, es complicado hablar de alteridad en el país. Los investigadores encargados de establecer las políticas lingüísticas y los políticos que revisan que los derechos humanos y la equidad se cumplan, deben desempeñar labores loables y dignas para que su función encuentre cauce. Sin embargo, pocos son los que toman enserio su labor y en la mayoría de los casos hay una cultura hegemónica sobre otra oprimida que lucha por sobrevivir. En el caso de México, la cultura hegemónica es la que habla español y la oprimida es la que habla las demás,
Hablar es nombrar al mundo. Las distintas formas de nombrar al mundo, son las distintas concepciones de este, al igual que las distintas maneras de vivirlo y comprenderlo.
Una vez más: cómo se establece un punto ecléctico entre la cultura oprimida y la hegemónica, siendo que la primera se constituye de muchísimas maneras de entender al mundo. Cómo se define la presencia de lo “malo” en estas circunstancias.
Quizás nunca ha existido la seriedad suficiente para plantear una solución equitativa a este problema

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Ah, el mal tiene muchos rostros basta con leer la sección nacional de un periódico Mexicano y ver fotos de una señora que le dicen la "maestra", llevo quince días de no dormir solo de la impresión.

Anita Iruretagoyena dijo...

Oh! no no.. de cualquier manera hay que alejarse del horror a toda costa

Anónimo dijo...

NO MANCHES PRIMA CREO QUE YO ESTOY POSEIDO, YA QUE TENGO SANGRE DE MUCHAS RAZAS, ASI QUE CUANDO MUERTA NO SE A QUE DIOS SE LE ENTREGRARA MI ALMA JAJAJAAJA... POR ESO CREO QUE TMB ESTOY POSEIDO PERO POR EL ALCOHOL!!!!!

QUE EL TIO MANOLO NOS SAVE!!!! JAJAJAJA

Anónimo dijo...

disculpa las faltas de ortografía pero el post fue etsprextsss

Anita Iruretagoyena dijo...

uy uy uy....

Yo recuerdo un artículo en La Jornada donde decían eso. Y ¿quién es ese biólogo marino del mal? Vaya, vaya.. una decisión eficiente para nuestros sistemas que nunca fallan.